¿Recuerdas cómo aprendiste?

En general, la vida nos enseña cosas buenas y malas; Si ahora mismo recapituláramos sobre cuales son los recuerdos más simbólicos que poseemos tendríamos una larga lista de momentos emotivos buenos y malos.

En un segundo plano, haciendo mayor esfuerzo, si pensamos en un sentido más practico, «las cosas que sabemos hacer», no me refiero solamente a leer y sumar, sino saberes extraescolares, como silbar, montar en bici, tocar la guitarra… Los recuerdos que evocamos de como aprendimos estas otras cosas son mucho más confusos pero también sabemos que detrás de ellos se esconde un momento también emotivo y muy motivador que nos impulso a ello.

Estaréis de acuerdo en que el momento de aprender algo nuevo debe estar rodeado de un ambiente propicio, estimulante y motivador.

Entonces, pensemos ahora ¿cómo aprendemos cosas como leer y sumar?

Puede darse el caso que si se recuerden, pero a la mayoría, lo que nos sucederá es que no acabemos de recordar como por fin entendimos en que consistía el tema; que seamos incapaces de evocar como aprendimos exactamente cosas tan mecánicas como andar o respirar en nuestro día a día.

¡Qué mágica es la escuela a veces! ¿no? Nos enseña constantemente sin que asimilemos lo valioso que es o será en nuestra vida. Nos enseña aunque hayamos tenido un mal día y no estemos motivados; Nos enseña hasta cosas que no nos gustan.

Nos guste o no, las asignaturas y el paso por el colegio, es algo más que una etapa en nuestra vida es un derecho que tenemos y debemos aprovechar, porque tengamos muy claro lo que queremos hacer en la vida o no, en ambos casos tenemos el derecho a partir de las mismas oportunidades, saberes básicos, valores, hábitos para crecer y desarrollarnos íntegramente y poder convivir en sociedad.

Pero os diré algo más, al terminar esta etapa, cuando ya podemos decidir que camino tomar, muchos han tenido tiempo de definir sus gustos, de estudiar las opciones, de elegir cosas muy distintas a las que les gustaba de pequeños y otros muchos de reforzar su personalidad para no influenciarse demasiado con los deseos paternos (que también influyen); En lo que las opiniones no cambian, es que en todos, al terminar, siempre nos preguntamos si pudimos haberlo aprovechado más.

¿Vosotros que opináis? ¿Recordáis como aprendisteis?

Saludos.

 

 

Verónica Alcalde Laserna

Sí sostenido

Estando en la facultad, un lunes cualquiera, durante la segunda hora de clase ya acabando, y observando que los alumnos mirábamos el reloj fantaseando con salir a desayunar, nuestro profesor quiso amenizar los últimos minutos poniéndonos un ejemplo acerca de la necesidad de la vocación en el maestro.

Para ello, recurrió a una anécdota que le pasó hace tiempo a una de sus hijas. (No diré asignatura ni el nombre puesto que afirmó que su hija lo mataría si descubriera que contaba su vida durante sus clases y no queremos que eso ocurra)

 

Su hija, de pequeña, adoraba la música. Con tan solo 6 años ya escuchaba a los grandes de la música clásica; Y no solo eso, tenía talento y tocaba la viola.

Admiraba, sobre todo, a la mujer que le estaba enseñado, a su profesora. Era muy buena tocando y daba conciertos. Era una amante de la música.

Cuando aparecía en algún concierto, la niña iba a verla y escucharla ensimismada tocar; Hasta que, por fin con 7 años, ella misma tuvo su primer cuarto de hora de gloria y tocó en un concierto. Estaba obviamente emocionada y encantada de hacerlo. Su familia y profesora acudieron a verla.

Al terminar la función, sus padres se acercaron a felicitarla, pero para su sorpresa su profesora se agachó y la dijo:- era ¡Sí sostenido!

Ante aquello y para quitarle seriedad, su padre (mi profesor) contestó: bueno pero las doscientas notas restantes ¡las has hecho perfectas!

Al día siguiente dejó la música.

 

En silencio, entendimos perfectamente todos lo que nos estaba contando nuestro profesor. En su breve relato observamos la importancia del papel del maestro. Esta “profesora” no era más que una amante de la música, le parecía más importante que la pieza estuviera ejecutada correctamente a lo que hubiera significado para aquella niña el hecho de dar su primer mini-concierto. Demostrando esa prioridad vemos que puede ser una profesional en su materia, la música, pero en el campo de la enseñanza no tiene ninguna vocación y por lo tanto no sirve para enseñar.

Hay que tener en cuenta que aquello que ocurre en la infancia puede marcarnos toda la vida para bien o para mal, por eso el papel del educador es tan importante.

Esto es algo que todos los docentes deben tener presente y cuidar: El niño y su pensamiento es moldeable, a medida que crece va tomando forma, va aprendiendo, va definiendo sus gustos, personalidad, limando o disimulando sus defectos… dejando atrás la ingenuidad la inseguridad… y nuestro deber es sacar lo mejor de cada uno y que se desarrollen plenamente.

Muchas veces pienso en la niña de la historia; Si esto le hubiera ocurrido ya de adulta con una personalidad más asentada, en el momento de plantearse la pregunta de “¿debo seguir con la música?” (Irónica y) automáticamente se hubiera respondido con un: Sí sostenido.

¿Vosotros que opináis?

¡Saludos!

Verónica Alcalde Laserna

Empiezo

¡Hola!

 

Me presento, soy Verónica administradora de la página.

 

Hace unos meses empecé a crear una web para ayudar a la gente de forma online facilitando algunos recursos relacionados con la educación y el trabajo.

 

Os contaré como surgió esta idea.

Durante la carrera (pedagogía), unas compañeras y yo creamos una web para un trabajo. En ella explicábamos las salidas formativas y laborales, e intentábamos promocionar alternativas de ocio y otros temas para los jóvenes. Esto me incentivó para conocer los sitios de creación de páginas web gratuitas su y manejo, sin embargo la web se quedó en un trabajo más. Cuando terminé mis estudios me encontré con muchos links e información que quería almacenar para uso propio en un futuro. Sin embargo, estaréis de acuerdo conmigo en que el saber hay que compartirlo. Así que ¿que mejor forma de almacenar que en una web pública, donde además podemos estar en contacto y preguntarnos dudas?

 

Actualmente, sigo intentando desarrollar esta idea, aprendiendo cosas nuevas y mejorándola poco a poco, no solo para tener una buena base de datos, sino para que sea útil a más personas.

 

Por otro lado, a parte de almacenar recursos para la web, existe una sección llamada blog en la que como habréis podido comprobar, voy a crearle un pequeño espacio para opiniones personales, probablemente llamado “artículos”; En ellos quiero mostraros un poco más mi forma de ver algunos temas, desarrollar el pensamiento crítico (vuestro y mio) e invitaros a opinar también. ¿La finalidad? la misma que la web: seguir aprendiendo y mejorando en lo que hago, a la vez que puedo ser de ayuda a los demás.

 

Con todo esto, doy por estrenada esta nueva sección, así que espero que os guste y comentéis si queréis.

 

¡Saludos!

 

Verónica Alcalde Laserna